El método por fricción:
calor que une y no traisiona.
Nuestro punto de fuerza es sin dudas la amplia gama de conocimientos tècnicos que hemos adquirido sobre el terreno y que continuamos a actualizar.
Entre la innovaciones más importantes, merece ser destacada la soldadura por roce o fricción, que nos permite alcanzar excelentes uniones entre diferentes materiales entre sí,
como aceros al carbono y aceros inoxidables. El secreto? Un proceso completamente mecanizado, sin utilizo de material soldante externo y sin que se genere la fusión: de esta forma se evita la formación de peligrosas zonas porosas y frágiles, impuridades, rajas y roturas. Uno de los dos componentes se coloca en rotación y empujado a contacto con el otro en forma tal de producir calor a través del roce.
El proceso se completa con la parada del movimiento relativo, y la aplicación de una mayor presión (forjadura) que permite de realizar una soldadura completa y homogenea, absolutamente fiable aun en caso de esfuerzos continuos e importantes. Una soldadura que se revela ventajosa económicamente, teniendo en cuenta el ahorro en el costo de las materias primas, de producción y la reducción de los tiempos de producción.